miércoles, 29 de enero de 2014

Capítulo 20: Siempre es por ti

Hoooooola Pequeños sinsajos :3333 Lo sé, llevo un siglo sin subir ninguna entrada, LO SIENTOOO. Pero bueno, aquí os traigo el capítulo 20 (haya paz) Un besazo, espero que os guste! :***




P.O.V. Prim:

La primavera ha quedado totalmente atrás. En las últimas dos semanas ha empezado a hacer mucho más calor que en ningún verano que haya tenido en el 12. Ahora todos nos paseamos en pantalones cortos, son realmente cómodos en los entrenamientos. Alec dice que he mejorado muchísimo, no sé si será cierto, pero lo que sí es verdad es que hace una semana obtuve la mejor nota de la prueba. Ni si quiera sé cómo lo conseguí, pero lo hice. No nos dicen la calificación de los demás, pero me
he enterado por medio de las chicas. La nota de Michel no es la peor, pero se ha quedado entre las más bajas, ¿cómo? No paro de repetírmelo, y de sentirme culpable por haberle quitado la que probablemente tendría que haber sido su calificación... él trabajó mucho más que yo. Me siento en el suelo, en mitad del pasillo, la luz del atardecer entra por una de las ventanas y me alumbra el rostro, dándome calor. Algo brilla sobre mi hombro, lo cojo, es un pelo del color del chocolate, de Michel. Noto que se me humedecen los ojos. Supongo que se le caería. Michel lleva una semana muy raro, a penas nos hemos visto, y en los entrenamientos evita el contacto conmigo por todos los medios. Cada vez que le hablo, contesta apartando la vista. Empezó a comportarse así justo un día después de la prueba. Al principio pensé que era por haberle quitado la nota... pero no podía ser por eso, no creo que se enfadara hasta tal punto...¿O sí? No he parado de preguntármelo, por eso no le he querido preguntar ni decirle nada... si está enfadado, no le voy a presionar. Por favor que solo esté enfadado, por favor... ¿Pero y si fuera algo más? ¿Y si me estuviera evitando porque quiere dejar... No,no, no. Para, para.
- ¡Prim!- Alguien grita mi nombre, al final del pasillo.
Es Caroline, viene corriendo hacia aquí. Me restriego los ojos, intentado eliminar cualquier evidencia. Cuando llega, se coloca frente a mí, yo sentada y ella de pie. Tiene las mejillas sonrosadas de haber venido corriendo, y el pelo algo despeinado. Pero dejando a un lado todo eso, sus ojos avellana reflejan una gran euforia.
- ¿Qué pasa?- le pregunto sonriendo, intentando que mi voz no refleje la pena que siento.
- Mike- su sonrisa es se ensancha hasta ser enorme.
- ¿Qué pasa con Mike?- pregunto, confundida.
- ¡QUE ME HA BESADO!- grita a todo pulmón, y empieza a dar saltos.
Cojo aire con fuerza, con los ojos abiertos como platos.
- ¿QUÉ? Eso es, eso es....- no encuentro una palabra para decir lo feliz que me siento por ella.
Caroline se me queda mirando, a la espera.
- PERO JODER CUÉNTAME COSAS, ¿CÓMO? ¿CUANDO? ¿DÓNDEEEE?- grito, como la típica adolescente histérica.
 ¿Desde cuándo me comporto así? Supongo que nunca había tenido una verdadera amiga, me llevaba bien con muchas chicas de clase, pero nada como la  amiga que ahora es Caroline. Pues sí, me he vuelto una adolescente histérica... y me da igual. Ella se ríe a carcajadas, y empieza a hablar de nuevo, pero entonces para en seco.
- ¿Qué te pasa?- me pregunta, con preocupación.
Mierda, seguro que aún tengo los ojos humedecidos.
- ¿A mí? ¿Pero qué me va a pasar?- digo riéndome.
Caroline parpadea un par de veces, y después sigue hablando, como si nada. Sabía que le gustaba Mike desde el primer momento, por cómo se sonrojaba, pero lo suyo parecía imposible viendo lo tímida que era Caroline. Aunque sí es cierto que en el último mes había cambiado mucho en comparación a como era antes (eso me habían dicho Lucy y Sarah), había pasado a ser una chica alegre, y la verdad es que era muy mona, al igual que Mike. No le extrañaba nada, solo se había sorprendido.
- Yo estaba fuera de la base, dando un paseo, entonces él salió por la puerta y me vio allí. Lo saludé y empezamos a hablar...bueno, lo típico...hasta que a la mitad de la conversación se quedó callado, y yo le pregunté que qué le pasaba- me agarra la mano con fuerza, radiante- el me sonrío y dijo "Caroline, la verdad es que... me gustas"- alza las manos, extendiéndolas, como si las palabra estuvieran escritas en el aire.
Me echo a reír.
- ¿Qué?
- No sé, me esperaba una frase más... increíble.
- ¿Ah, sí? ¿Y qué es lo que te dijo Michel a tí, lista?- pregunta con las manos en las caderas.
Me muerdo los labios con fuerza, y bajo la cara rápidamente para que no vea mi expresión cuando ha mencionado a Michel. Aprieto los dientes y levanto cabeza. Ya es demasiado tarde.
- Vale, me vas a decir ahora mismo qué es lo que te pasa- intenta sonar dura, pero sé que está preocupada.
- Ya te he dicho que nada- sonrío a medias.
- ¿Y tú crees que lo de antes me lo he creído? Solo estaba esperando a que me lo dijeras tú.
Suspiro y echo a andar por el pasillo, Caroline me sigue rápidamente.
- Es...Michel. Desde el día de la prueba está muy raro conmigo- digo, mordiéndome el labio.
- ¿Raro en qué sentido?
- A penas me habla, no me toca, está muy...frío. Creo que es por la prueba, porque le quité la nota que debería ser suya.
- Prim, eso es...
Pero se ve interrumpida por una risa cantarina que suena a nuestra espalda. Me giro en redondo, y Caroline hace otro tanto. Es Hannah.
- ¿Y tú eres su novia? ¿Pero cómo puedes ser tan idiota?
- ¿Cómo?- pregunto, confusa, con la rabia contenida.
- Crees que Michel no te habla por le has quitado la nota, como si tuviera cinco años, no tienes ni ide...
- No sé por qué debería importarte todo esto a ti- le digo fríamente.
A mi lado, Caroline intenta decir algo, pero Hannah le interrumpe rápidamente.
- Me importa por Michel- se cruza de brazos- porque no es justo que pienses así de él. Es mil veces mejor persona que tú, no sé como te puede quererte a su lado- sonríe, satisfecha, taladrándome con la mirada.
- ¿Celosa, tal vez?- me rió, sin ningunas ganas de hacerlo.
Lo entiendo ahora todo, Hannah está celosa. Me mira sorprendida, abriendo los ojos. 
- ¿Que estoy celos...- la sorpresa cambia a rabia, porque me he dado cuenta de lo que siente- A ver si te enteras, niñata, Michel se comporta así contigo por su prueba. No por la nota, si no por lo que pasó en la prueba. En ella tú ibas a matar a Allison, y él te lo intento impedir. Y luego, al parecer, tú morías. Por eso a penas puede mirarte a la cara, cree que tiene la culpa de que tú murieras. Y, además, estaba confundido porque debería haberte dejado matarla, y no lo hizo. Aunque luego se dio cuenta de...
Pero ya no sigo escuchándola. Es demasiado información que procesar. ¿Muerta por culpa de Michel?...¿Y por qué no me dejó matar a Allison? ¿Quería salvar su vida? No entiendo nada, ¿y por qué Hannah sabe todo esto? Un escalofrío me recorre la espalda. Michel tendría que haber hablado conmigo sobre el tema, fuera lo que fuera, le comprendería. Sin embargo, ha preferido contárselo todo a Hannah, y no acercarse a mí... No son celos, no, me siento...traicionada.
- ¿Dónde está?- susurro.
- ¿Qué?- me pregunta, visiblemente sorprendida por la interrupción.
- ¿Dónde está Michel?
Caroline clava la vista en mí, preocupada. Hannah me mira, sin hablar, y sé que no me va a contestar. Me doy la vuelta, y, haciendo caso omiso a Caroline pidiéndome que me quede, me voy.


P.O.V. Michel:

La cabeza me da vueltas. Tengo la vista nublada. Me siento feliz, y a la vez dolido. A duras penas recuerdo cómo he llegado aquí, solo sé que estoy rodeado de risas, y ebrio, muy ebrio. Los ojos azules como el cielo de Prim me rodean, por todas partes, todo es azul y precioso. Llevo una semana comportándome como un gilipollas, lo sé. Quiero ir a buscarla y abrazarle, pero también quiero alejarme de ella.
- Toma,tío- balbucea James, pasándome una botella de licor transparente.
Solo con verla me arde el estómago. Pero me da igual, solo quiero olvidarme de todo un rato. La agarro torpemente y me la llevo a los labios. Me bebo la mitad en dos tragos.
- Eh, que tiene que haber para todos- dice Harry, y los dos se echan a reír. 
Río con ellos, y no sé por qué. Entonces, la puerta se abre de golpe, y los tres nos giramos bruscamente. O eso creo, todo me da vueltas, no me acuerdo de lo que acaba de pasar, solo veo dos ojos del color del cielo mirándome desde la puerta, y una melena negra cayendo hacia abajo, enmarcándolos, como una cascada oscura. O alomejor sí que es una cascada, y lo que estoy mirando es el cielo, y lo que parecen dos cejas fruncidas son solo dos nubes negras. 
- Michel, quiero hablar contigo- dice una voz angelical, pero enfadada.
No soy consciente de mis movimientos, por eso me sorprende verme de pie, tambaleándome hacia la puerta.


P.O.V. Prim:

- ¿P...Prim?- a penas consigue pronunciar mi nombre, y suelta una risa tonta.
- ¿Estás borracho?
Él no contesta, solo me mira, respirando con dificultad. Al cabo de un momento, da un paso, colocando su cara a centímetros de la mía, y me besa. Su aliento huele a alcohol, y yo siento que sólo me quiero para esto. Lo aparto de un empujón, con lágrimas contenidas en los ojos. Él me mira, atontado, sin saber qué ocurre a su alrededor, y me hace sentirme pequeña y sola.
- ¿Qué haces?- mi voz se quiebra al preguntar.
- ¿Qué?- pregunta, tambaleándose ligeramente.
- ¿Crees que puedes estar una semana sin mirarme, e intentar besarme ahora, ebrio?
Parece que empieza a darse cuenta de lo que ocurre.
- Hannah me lo ha contado todo- hasta yo me doy cuenta de cómo se crispa mi voz al pronunciar su nombre- me ha dicho que no dejaste que matara a Allison, y que a penas me hablas porque supuestamente moría por tu culpa en tu prueba, ¿Es eso verdad?
Michel palidece de golpe. Tras un minuto de silencio, contesta.
- Sí. Yo...no quería q-que pasara- balbucea, esforzándose porque las palabras salgan de su boca- No quería que pasara- esta vez habla más claro- fue lo más doloroso que nunca me había ocurrido, la....la sensación de perderlo todo, de perderte....- gime, y hace una mueca de dolor.
Está temblando. Siento que algo dentro de mí se ablanda, y, por un momento, relajo los músculos, que llevaban tensos todo el rato. Pero entonces recuerdo que la que me ha contado todo esto ha sido Hannah, y me vuelvo a tensar.
- Podrías habérmelo contado para dejar de sentirte culpable, en vez de no hablarme, podrías...podrías haberlo hecho. No acudir directamente a Hannah.
Sé que estoy siendo mezquina en ese sentido, pero debería saber que puede confiar en mí para contarme cualquier cosa.
- Yo...no quería decírselo a nadie, pero ella vino, e insistió, y...y...
De repente, me arrepiento treméndamente de no haberle insistido yo. Lo único que quería era no meterle presión. 
- Y se lo contaste- termino la frase por él- Michel, yo te hubiera preguntado, pero quería dejarte espacio, pensaba...pensaba que me lo contarías cuando quisieras.
Los dos nos miramos fijamente, en silencio, comprendiendo los actos del otro. Entonces, me acuerdo de algo.
- ¿De qué te diste cuenta?- le pregunto
Frunce el entrecejo. La nube de entumecimiento que cubría sus ojos se está disipando, cada ve está menos atontado.
- Hannah me ha dicho que estabas confundido por no haberme dejado matar a Allison, aunque luego te diste cuenta de algo.
Me mira, y en sus ojos vuelve a haber el mismo brillo de siempre.
- No sabía por qué había eso hecho- contesta- ¿Se supone que quería salvar la vida de Allison? ¿Qué era un traidor? Pero... pero después me di cuenta de que era por ti.
- ¿Por mí?
- Sí, porque no quería que fueras lo que nunca querías haber sido...una asesina. No quería que hicieras algo de lo que después te arrepintieras, que te hiciera sentir mal- habla con rapidez.
Me doy cuenta de que lleva manteniendo las distancias conmigo desde que le empujé, por si acaso. Me acerco hasta quedar a dos palmos de él. No sé por qué he llegado a estar tan lejos suya, por eso me acerco un poquito más. No sé por qué le he empujado, no sé cómo me he podido alguna vez enfadar con él, ni sentirme traicionada. Michel entrelaza su mano derecha con la mía, y me mira directamente a los ojos.
- Por ti-susurra- siempre es por ti.
No sé cómo le puedo querer tanto.




3 comentarios: